Las calles del barrio te ven partir sin entender, hoy sabes que nada puede calmar tu soledad: "Es que nadie cree en mi canción, es que nadie espera nada de mi, todas estas mierdas me hacen pensar que Dios me olvidó, y por eso es que quiero abrir mi cuerpo a las lluvias tibias del camino aquel, donde mueren estos negros pensamientos, donde nace el viento de la libertad. Siempre en libertad"
Es tarde, las sombras cubrieron ya la gran ciudad. La luna, tu amiga, toda la noche te acompañará, y sin darte cuenta amanecerá y un nuevo día nacerá de ti si no te arrepientes de mirar el sol y al fin ser un hombre abriendo la puerta que duerme en tu mente, y soplando fuerte siempre y sin parar, como sopla un ángel perdonando todo, como sopla el viento siempre en libertad.
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